martes, 26 de abril de 2011

Dreams come to me

Como ya sabrás, hacía muchísimo tiempo que no soñaba o que me acordara de los sueños. Estos últimos días he logrado recordar dos. Uno hizo que me levantara muy enfadado. El otro hizo que no parase de llorar.

¿Por qué cuando por fin consigo soñar, sueño contigo?

En el primero, estaba yo en un piso nuevo, supongo que mío, y había una especie de fiesta de celebración. Estaba hablando con uno, que ni conozco ni conocía dentro del sueño. Él me dijo que era tu actual pareja y que tú me dejaste porque quería poner una bomba en mi coche “¿Pero qué demonios le pasa a ésta?” me pregunté indignado “¿Todavía sigue inventándose mentiras sobre mí?”. Quizás mi subconsciente está un poco harto de oír tus memeces acerca de lo que yo hago o dejo de hacer, o de lo que yo supuestamente hice.

El segundo sueño, es algo más alarmante: Es el primer sueño que no lo sueño en primera persona. Estabas tú en tu casa (no tu casa actual, parecía una casa distinta, pero aún vivías con tus padres, como ahora) Limpiando y ordenando y de repente llaman al timbre. Era yo. Dispuesto a pedirte perdón incluso por lo que no había hecho y me atribuías. Después de convencerte para que hablásemos, empezamos a discutir de nuevo. Y yo rompí a llorar, suplicándote que volvieras conmigo, que iba a ser distinto, que no podía vivir sin ti.

Desde que tuve el primer sueño contigo, no he dejado de estar triste, vuelvo a estar deprimido. Una parte de mí te echa tanto de menos, que sería capaz de cualquier cosa con tal de que volvieras a mirarme. Otra parte de mí está tan enfadada contigo, que es capaz de cometer locuras para odiarte más aún.

Soy dos yo en un mismo cuerpo, de nuevo, otra vez. El “yo” bueno, es el que te echa de menos, el que no le haría daño a una mosca, a menos que sea por ti. El “yo” malo es el que se está tomando las cosas con calma, meticulosamente, jugando al ajedrez con la gente que te rodea.

Lamentablemente tu predisposición a no querer hablar conmigo le da ventaja a mi “yo” malo para hacer lo que quiera. Espero que no sufras demasiado, me he dado cuenta de lo mala persona que puedo llegar a ser.

Te pido perdón por adelantado.