viernes, 25 de febrero de 2011

Cansado de todo

Estoy tan harto de todo, que no tengo ni ganas de escribir aquí.

No hacéis más que joderme, de múltiples maneras.

No me he portado mal con vosotros, como para que me tratéis así.

A partir de ahora, creo que seré un poco más hijo de puta, a ver si la vida me sonríe como a vosotros. Seguiré vuestro ejemplo.

Gracias por hacerme sentir una mierda.

viernes, 18 de febrero de 2011

El precio de los recuerdos

Todo lo que se recibe en esta vida, tiene un precio. Todo lo que se da o te quitan, es la manera de pagarlo. Todo tiene un precio. No me refiero al dinero, no. Ese tipo de pago es demasiado superficial.

A mí me toca pagar el precio de los recuerdos. Todo lo bueno que he pasado, los buenos momentos, con mis amigos, con mi pareja. Todo. Y me toca pagar recordándolo día a día y viendo como de la noche a la mañana, lo pierdes todo.

Algunos dirán que son cosas de la vida, que pasa constantemente. Me da que pensar, que aquellos que se han olvidado fácilmente de lo vivido conmigo, es que realmente no lo pasaron tan bien. O que no quieren pagar por esos recuerdos y los desechan.

Yo no quiero perder los buenos momentos. Y el precio a pagar es el malestar que siento. Tengo miedo a que ocurra lo mismo, tengo miedo a que ocurra algo más intenso. Los recuerdos me hacen pensar que no se puede confiar en nadie. Hasta tu mejor amigo te puede apuñalar por la espalda. Si lo olvidara, volvería a pasar lo mismo una y otra vez, y no quiero. Además, no quiero borrar 8 años de mi vida, y mucho menos, 16. Aunque de esos 16, 3 no son ni recuerdos con esa persona, ni muchos de ellos son recuerdos bonitos. Pero al fin y al cabo son recuerdos, por los cuales, debo pagar. Y lo acepto.

Una mala decisión, confiar a medias en quien ni siquiera debías haber confiado… Son errores que no debo permitir que vuelvan a ocurrir. También veo un error haberme enamorado. El amor sólo hace daño.

El amor, el amor ¿Qué es el amor? El amor es un estado emocional incierto, te hace cometer locuras, y te nubla la mente para no poder pensar con claridad a veces. No eliges las mejores decisiones estando enamorado.

El precio de los recuerdos, es recordarlos una y otra vez, añorar los buenos, y sentir tristeza por los malos. El corazón se encoge al recordar detalles a los que uno en su momento no les dio importancia, pero que habiendo pasado el tiempo, ves con claridad que ese detalle significaba algo, algo muy serio.

Los recuerdos, son buenos y malos a la vez. Los míos, en concreto… Los quiero tomar como buenos. Pero también me hacen recordar lo que he perdido. Echar de menos a la persona que más importante ha sido para mí, para mi vida. Ver como la he perdido poco a poco. Ver como me esforzaba sin resultado alguno. Y ver los errores que he cometido una y otra vez. Ver mi culpa en todo esto.

No sé ni para qué escribo aquí, nadie está interesado en leerlo. Sólo me desahoga un poco, cuando voy a estallar o algo. Para no perder la cabeza y hacer locuras

Si supieras, si comprendieras, lo que te echo de menos…

miércoles, 16 de febrero de 2011

Mentiras y más mentiras II

Y ahora… Un budista entre las filas. ¡Es que me parto! ¡Y vegetariano! ¡JUAS!

Quiero dejar claras unas cosas…

Tú, “budista”… ¿Desde cuándo lo eres? Será desde hace 2 horas, porque lo que es regirte por la ética budista… NUNCA lo has hecho, y menos conmigo… Me hiciste muchísimo daño emocional al usarme, al mentirme, al hacerme confiar en ti y apuñalarme por la espalda… Al no defenderme cuando me han insultado, a mí, a tu supuesto amigo…

Un budista, evita hacer daño, y no sólo se refiere al daño físico… No se puede mentir, no se puede engañar, no se puede insultar… ¡Y en los últimos 4 meses has hecho eso y más! ¡Me entran ganas de ir a visitarte y a darte una paliza, a ver si te defiendes! Si no te defiendes, por evitar hacerme daño, te creeré. Pero ¿Vegetariano? ¿TÚ? La última vez que nos vimos te comiste una hamburguesa que Dios tiembla… ¿Eres un vegetariano de palo? ¿Es que mola ser vegetariano?

Y ahora llegamos a lo que es ser budista realmente. No solo se basan en no hacer daño, no. No se puede mentir, pero tampoco es eso lo único que es ser budista. Un budista busca el equilibrio. No ser demasiado ostentoso, no fustigarse tampoco demasiado, no sé si lo entiendes… Pero decir que eres vegetariano porque “mola”, es ser ostentoso… Comprarse un MacBook nuevo, es ser DEMASIADO ostentoso…

¡No me hagas reír! Teniendo en cuenta lo hipócrita que has sido conmigo, que digas que eres budista me hace pensar que no sabía quién era mi mejor amigo… Eres budista porque ¿mola? No, si al principio hice bien en no querer contarte nada de lo que iba a hacer… No eres una persona en la que se pueda confiar, me lo has demostrado después. Y antes también, pero se supone que a los amigos SE LES PERDONA, y yo te perdoné muchas cosas que pasaron 3 años antes de que nos reconciliáramos… No soy un amigo de “usar y tirar”, no señor… Pero es lo que has hecho, con esta ya, dos veces… Y esta vez no te podré perdonar, porque al menos la otra vez, para mi corazón, seguías siendo un amigo, que lo estaba pasando mal y te intenté comprender. Ahora ya no, no eres un amigo, eres una persona cruel, hipócrita, despiadada y que sólo busca el beneficio propio POR ENCIMA DE TODO, es decir, otra ostensión más…

Espero que eso del Karma en lo que creen los budistas de verdad, te haga pagar todo junto…

No me hagáis reír, HIPÓCRITAS.

Mentiras y más mentiras

Si hay una cosa que odie más que nada, es que un “amigo” me mienta. Bueno, sí, la hay: Que me mienta y encima me utilice. Pero este no es el caso, o al menos, no lo creo así. Parece que quiero ser desconfiado pero no lo consigo del todo.

Pongamos el caso: Un ”amigo”, el cual me ha “comprendido”, me ha “animado” a que siga adelante y me olvide de ella. Qué casualidad, que un día, de repente, me doy cuenta de que me ha bloqueado en el msn, y lo que es más, “aparentemente” por una razón absurda. “Resuelta” la duda, me niega haber hablado con ella “ni por internet” desde hace 3 meses o más, que ella para nada es su tipo. Y también me recalca que sigue soltero y “que va a intentar algo con una que le lleva gustando mucho tiempo”. Pero “no consiguió nada” según él.

A ella la han visto hace una escasa semana, hablando con uno, de similares características a las de mi “amigo”.

Un día antes de San Valentín, a él le da por “querer regalar algo y no sabe el qué” (estado de Tuenti). Y el mismo día de San Valentín, al final del día “Da gracias por los regalillos”

Vamos a ver, dos cosas: Una persona sin pareja, no suele recibir nada por San Valentín, y menos regalar nada… A menos que estemos en Japón y nos declaremos con chocolate. Y llegando a esta conclusión de que sí tiene pareja, llegamos a la segunda cosa… ¿Por qué ocultármelo?

¿Acaso está ella saliendo con él? ¿Es él un amigo de verdad? Sabiendo cómo estoy por ella aún… ¿Por qué me da indicios para pensar que está con ella?

No sé qué pensar… A eso yo lo llamo traición, lo mires por donde lo mires…

Odio, furia, ira, todo junto, vuelve de nuevo a mi cabeza, golpeándome con fuerza… Creo que voy a perder el control de mí mismo como las cosas sigan torciéndose así…

No me decepcionéis más. Mirad qué estáis haciéndome.

¡PARAD YA ESTA TORTURA!

No puedo más, no aguanto más… Te quiero y no quieres ni verme.

lunes, 14 de febrero de 2011

Ya mismo acaba…

Ya mismo acaba San Valentín. Y sin noticias tuyas… Si esta canción te parece triste, yo lo estoy más aún sin ti…

La melancolía me invade cada noche y no puedo dormir…

San Valentín… Patrón de los ¿enamorados?

Yo, que soy una persona que rechaza mucho las fechas señaladas, impuestas por centros comerciales, como la Navidad, Reyes, San Valentín, y otras tantas, ya no sólo impuestas por centros comerciales, como la Semana Santa… Yo, que las rechazo porque su significado nada tiene que ver con el cariño, con el amor, con ser el mejor padre del mundo… Yo, que creo que por un único día no voy a querer o amar más… Yo, que siempre he opinado que está el resto del año para demostrar lo que se intenta demostrar en un único día… Yo, hoy, me encuentro mal. San Valentín, patrón de los centros comerciales y de las cursiladas máximas para una noche…

Estoy esforzándome mucho en olvidarte, de verdad que lo intento… Pero no puedo… Y no sé ni por qué, pero hoy no debería estar así. Quizás, aunque este día sea tan sólo una estrategia de los centros comerciales para aumentar el consumismo compulsivo, este día para mi subconsciente sea algo especial, porque mi primer San Valentín, recibí conguitos. Y lo celebramos varios años, como buenamente podíamos…

Pero repito que no debería de dolerme hoy el pecho, porque a ella la eché de mi vida. Tuve una mala idea, y le hice mucho daño. Después el daño me lo ha devuelto con intereses incluidos… Y no quiere saber nada de mí.

¿Lógico? Se ha olvidado demasiado rápido de mí, de los buenos momentos juntos… Yo no. Y por eso creo que hoy estoy así.

Hoy más que nunca, te echo de menos.

martes, 8 de febrero de 2011

¿Soy mala persona?

Me da miedo pensar que sí. Pero tengo bastantes motivos para creer que así es.

Me regocijo con el hecho de que alguien que no tuvo miramientos de ningún tipo para hacer lo que le dio la gana, ahora mismo exprese su frustración personal en un blog, dándome a conocer que él mismo se odia, que odia su vida, y que no le van bien las cosas. Pienso que se lo merece, aunque yo esté, en cierto modo, igual. Mis motivos son distintos, es verdad. Él me hizo mucho daño haciendo lo que hizo, supuestamente un amigo.

También me atormenta la idea de perder la cabeza: A veces me pasa, que hago cosas sin querer hacerlas, al menos, no lógicamente hablando. Cosas que mi cerebro desecha casi al instante cuando pienso fríamente, pero que cuando me inundan las imágenes, los recuerdos, la ira… Pierdo el control, y las hago, pero de momento sin graves consecuencias.

Empezó siendo tan sólo imaginaciones de lo que mi mente ansiaba que ocurriera para tranquilizarse: Emboscadas a aquellos que más daño me han hecho, torturas, palizas… Ya os lo podéis imaginar… Más adelante se tornaron en palabras. Palabras que no quería decir, pero que dije. Tales como: “Toda la culpa la tiene mi padre. Debe morir”, “Le daré tal paliza a –perdonad que omita el nombre, pero es necesario-, que no saldrá del hospital nada más que en silla de ruedas” y “Cállate, zorra asquerosa, si no hubiese sido por ti, aún sería feliz”. Obviamente no quiero hacerle daño a nadie, es más, no me veo capaz. Pero más adelante se tornaron en acciones.

Recobro el sentido común al tiempo de haber empezado una serie de acciones: Robar cuentas de redes sociales, correos electrónicos, en busca de pruebas, de puntos flacos, pero antes de conseguir nada, darme cuenta de que lo que hago no quiero hacerlo… O quizás, la que más me asusta, es que cogí las llaves del coche, el chaquetón, salí por la puerta, y recorrer andando los casi 2 kilómetros que me separan de casa a donde tengo aparcado el coche, con una sola idea en mente: viajar a otra ciudad, a darle su merecido a 4 personas. Y es aquí cuando agradezco estar en una ciudad distinta, porque si no hubiese sido así, en el tiempo que tardé entre salir de casa, llegar al coche, y arrancar (es lo que hice hasta que me di cuenta de lo que hacía); estando en su ciudad, al menos me habría dado tiempo a darle una paliza a uno de los que me han hecho daño. Y sé que mi mente ansía venganza con aquel que más daño me ha hecho: El que era mi mejor amigo. Y prefiero acordarme de los buenos momentos que pasamos él y yo juntos. Nada más y nada menos que 16 años de amistad.

También escribo anónimamente en este blog, poca gente que me conozca lo habrá leído, y creo que sólo son dos personas que yo conozca las que leen o han leído parte de este blog, en el cual escribo precisamente para controlar estos ataques de ansiedad/histeria/ira. Si no me desahogase aquí, imagino que habría perdido la cabeza hace ya un tiempo.

Empiezo a pensar que tras esta fachada de bonachón tonto y confiado, se esconde un verdadero hijo de puta. Y eso me da miedo. Mi padre es un verdadero hijo de puta, y siempre he luchado por no ser como él. Pero “de casta le viene al galgo”, me imagino…

Tan sólo ansío ser feliz, dejar de tener estas preocupaciones, ser una persona alegre, como lo era hace 2 años… Aunque por fuera mucha gente me vea bien… Estas cosas que acabo de contar, me atormentan.

 

“Sé que no debí haber hecho lo que hice, sé que no debí ponerla a prueba. Todo es por mi culpa.” es lo que pensé justo antes de hincar la punta del cúter en mi muñeca. “Sin ella no puedo vivir” seguía pensando cuando arrastré el filo hacia abajo, y las lágrimas, y la sangre, manchaban el teclado del ordenador. “Debe saberlo, mi muerte debe pesar sobre ella. No ha querido escucharme, así que su castigo es saber que estoy muriendo por ella” pensé mientras, mareándome, escribía un correo dirigido a ella, donde le intentaba contar lo que había hecho. Me dio tiempo a mandarlo, antes de perder el conocimiento.

Desperté en el hospital, y rápidamente comprendí que algo no había salido bien: No caí en la cuenta de que la sangre se coagula. Perdí bastante sangre, pero gracias a que el corte no fue muy profundo, y a que no metí el brazo dentro de agua caliente para que no se coagulara la sangre, no llegó a ser mortal. También alguien me echó en falta y vino a buscarme.

Abatido por el fracaso, la vergüenza de haberlo intentado me atormentó unos días. Pero ahora comprendo que si todo hubiera acabado ahí, no tendría oportunidad de arreglar las cosas, aunque pase mucho tiempo para eso.

 

¿Soy mala persona? Creo que no, tan sólo soy un cobarde que no está preparado para el mundo real.

Manzana Podrida

Jamás pensé que canciones que me gustaban tanto, podían significar todo esto.

Bad Apple, la cual medio traduje mientras la escuchaba durante uno de mis insomnios, escuchándola dando vueltas en la cama, me dije a mí mismo que era casi imposible que lo que yo creía entender era la traducción. Pues bueno, me ha picado la curiosidad, ahora que la he vuelto a escuchar dando vueltas en la cama, y he buscado varias traducciones. La que más se acerca a la mía, es esta:

Y realmente, describe cómo me siento a veces.

He encontrado otra traducción, que afinando un poco el oído creo que es más correcta. Pero no concuerda tanto con mis sentimientos. El vídeo no lleva los subtítulos incrustados, sino que tenéis que activarlos en el botón “CC” del reproductor de Youtube. Por eso pongo sólo el enlace en lugar del vídeo: [Alstroemeria Records] Bad Apple!! (spanish subtitles)

martes, 1 de febrero de 2011

Miedo a enamorarme otra vez

No puedo. No me veo capaz. Para que eso ocurriese, lo que sienta por esa otra persona debe ser mayor que lo que sentía por ti… Y tampoco…

Si fuese menor, lo descartaría de inmediato. El sexo por sexo no me llena, lo he comprobado. No necesito sexo, necesito amor… No sentir al menos como mínimo lo que sentía por ti me haría pensar que soy una mala persona, engañando a la que sí que siente algo por mí… No lo sé.

Si siento algo parecido o que me parezca igual que lo que siento por ti, automáticamente lo rechazaría, porque no quiero acabar del mismo modo y dolorido por las malas decisiones… Porque siempre las hay.

Si consigo sentir algo mayor y que crea que es más verdadero… No lo veo posible. Y quizás si lo consiguiese, me daría miedo. Mucho miedo. Me volvería a encerrar en mí, como cuando tú yo yo comenzamos a salir.

Tengo miedo de dejar de sentir por ti lo que siento. Tengo miedo de sentir algo más con otra chica. Tengo también miedo de no volver a sentir nada parecido.

Tengo miedo a amar a otra persona que no seas tú.

Te echo de menos. Mucho. Reírme contigo, pasar buenos momentos. Hablar en los difíciles. La confianza que tenía contigo, no la podré tener con otra persona. Me dabas seguridad en mí mismo. Mi seguridad flaqueó cuando empezaste a olvidarme. Empecé de nuevo a encerrarme en mí, empecé de nuevo a tomar decisiones estúpidas.

Tengo miedo del futuro. Me gustaría volver al pasado, en nuestro De’Lorean, y cambiar todas esas decisiones estúpidas que fueron distanciándonos. Aunque sólo sea en mi imaginación, tú y yo, aún somos felices.

Tengo miedo de dejar de pensar eso también. No te odio, no me dejas amarte… Y tú muestras indiferencia ante todo ¿Qué piensas? ¿Qué buscas? ¿En serio puedes volver a sentir lo mismo por otra persona, o incluso a superarlo? Qué fácilmente me has olvidado… Y me duele. Por eso sé que no puedo volver a amar…